
Recopilación: Más allá de la escuela: Prácticas de trabajo en red y liderazgo intermedio bajo la lupa de la mejora continua
La conformación de redes para mejorar los resultados educativos permite acelerar el progreso para el logro de tres imperativos morales para quienes trabajamos en educación: equidad, calidad e inclusión. Estos tres imperativos orientan la visión de C Líder, de las comunidades educativas y de los líderes intermedios que comparten sus experiencias en este libro. Las experiencias reseñadas refuerzan la necesidad de generar capacidades para que esa visión se transforme en los resultados que se proponen alcanzar. Como lo ejemplifican las siete experiencias que se analizan en este libro, para avanzar necesitamos realizar acciones sistemáticas, planificadas, y monitoreadas. Estas siete experiencias de trabajo en red y de líderes intermedios apoyando a sus centros educativos son analizadas desde los principios de la ciencia de la mejora.
El motor del trabajo que desarrollan estas redes y líderes intermedios es el aprendizaje para el mejoramiento continuo en educación. Las experiencias que se describen y analizan en este volumen destacan que el aprendizaje en red involucra 4 procesos que cobran distinta relevancia en respuesta a las necesidades y prioridades de las redes y las unidades educativas que las integran (Jackson y Temperley, 2006):
1. Aprendizaje de otros: Los integrantes utilizan las diferencias individuales y comparten lo que cada uno ha aprendido o realiza frente a situaciones comunes. Por ejemplo, se aconsejan mutuamente respecto a cómo abordar un problema.
2. Aprendizaje con otros: Los integrantes se involucran en actividades que les posibilita co-construir conocimientos y un sentido compartido respecto de los problemas y sus causas. Por ejemplo, realizan una investigación colaborativa, monitorean, analizan datos y ajustan sus acciones de acuerdo a una comprensión más amplia y profunda del contexto y de sí mismos como actores en ese contexto.
3. Aprendizaje a favor de otros: Los integrantes aprenden prácticas que pueden ser utilizadas por otros profesionales en las unidades educativas o por los y las estudiantes. El aprendizaje individual necesita transformarse en un recurso colectivo para el logro de metas institucionales.
4. Meta aprendizaje: Los integrantes reflexionan acerca de cómo ellos aprenden y pueden derivar principios que les ayudan a organizar su trabajo y el de sus comunidades educativas de maneras más efectivas.
Las siete experiencias operacionalizan las características de los centros educativos que son organizaciones que aprenden Kools y Stoll (2016). Algunas experiencias destacan cómo, desde el nivel intermedio, se desarrolla una visión compartida centrada en el aprendizaje de todos los y las estudiantes. Otras, ejemplifican cómo promover el aprendizaje continuo para todo el personal a través del aprendizaje en equipo, la colaboración y el intercambio de conocimientos. Otras ejemplifican cómo establecer una cultura de indagación e innovación. En todas se ejemplifican las prácticas de liderazgo centradas en el aprendizaje de los y las estudiantes.
Carmen Montecinos
Directora Ejecutiva de Líderes Educativos PUCV y C Líder.
Pontificia Universidad Católica de Valparaíso.